miércoles, 23 de febrero de 2011

EL VIAJE POR EL MUNDO

Érase una vez tres hermanos llamados Jaime, Mario y Miguel. Estos hermanos leyeron “La vuelta al Mundo en ochenta días” y querían hacer lo mismo que en el libro. Al día siguiente, al llegar del colegio, Jaime, el hermano mayor, que tiene trece años le preguntó a su padre:¿podemos dar la vuelta al Mundo en ochenta días? Su padre contestó: No, dar la vuelta al Mundo en ochenta días, es imposible. Miguel el hermano mediano de diez años dijo a su padre: Podemos ir a China, y podrás comer tu plato favorito. Entonces su padre, sin pensárselo dijo: Lo hablo con mamá y si dice que sí,¡Daremos la vuelta al Mundo en ochenta días o menos!. Después de qué su madre aceptase la oferta, hicieron las maletas, compraron el billete de avión y fueron a Francia. Se alojaron en un hotel muy bonito cerca de la Torre Eiffel. Después de tres días, Mario el hermano pequeño de ocho años, preguntó: ¿A qué país vamos a ir ahora?. A África. Dijo su madre. El barco tardó un día en llegar a África. Allí fueron a visitar el desierto del Sahara y disfrutaron montando en camellos. Después fueron a la selva y se encontraron con una víbora venenosa. Jaime dijo: No hagáis ningún movimiento brusco e id alejándoos poco a poco. Al final escaparon de la víbora y fueron a China. Entonces fueron a un restaurante chino. El padre dijo: quiero unos rollitos de  primavera. El chino no le entendió y Jaime dijo: Yo hablo chino. Entonces Jaime le susurró al oído cómo se decía rollitos de primavera en chino. Al día siguiente, Mario dijo: ¿A dónde vamos ahora? A Italia dijo  Miguel. Al llegar a Italia, fueron a la torre inclinada de Pisa. La madre bromeó: Al llegar a la cima de la torre, ¿quién va a comer pizza? Al llegar a la cima de la torre, como Miguel tenía mucho vértigo, se mareó y se iba a caer, pero los familiares le agarraron a tiempo, tiraron fuerte de Miguel y lo salvaron. Después recorrieron el resto del Mundo y regresaron a España en ochenta días.

FIN.

Pedro